Rechazamos ataques contra creyentes y no creyentes
Comunicado de prensa
Mayo 24 de 2018.
La Asociación de Ateos de Bogotá y la Corporación bogotana para el Avance de la Razón y el Laicismo – Bogotá Atea, junto con las otras asociaciones y grupos de ateos del país, comunica:
- Rechazamos tajantemente el ataque a la iglesia del sacerdote católico Jesús Hernán Orjuela “Padre Chucho”, pues estamos en contra de cualquier manifestación violenta o daño en propiedad privada de cualquier ciudadano colombiano, ya que creemos sinceramente en la importancia de la tolerancia y coexistencia pacífica en el marco del respeto de todos a las leyes que nos cobijan y que ninguna persona está por encima de estas.
- Si bien nuestras organizaciones han sido críticas contra el abuso del sacerdote respecto al uso sin los permisos adecuados del espacio público, los mecanismos que hemos usado han sido la protesta pacífica y las vías legales y nunca apoyaremos acciones violentas o que estén en contra de la ley. (El derecho de los niños al parque prevalece sobre misas al aire libre juez/)
- Este ataque por parte de vándalos no está de ninguna manera relacionado con nuestras organizaciones o nuestros simpatizantes, pero debido a las declaraciones de algunos feligreses tememos que los miembros más conocidos de nuestro grupo u otros ateos que ni siquiera tengan que ver con esta justa causa (nuestro deseo de proteger el espacio público donde el derecho de los niños prevalece al de otros, como lo dictaminó el juez que falló a favor la tutela interpuesta en este respecto), corran peligro o sean acusados falsamente ante las autoridades tal como ocurrió anteriormente. (Ateos inocentes plantón chucho/, Comunicado plantón chucho )
- Instamos a todos los habitantes de la ciudad y el país a evitar tal clase de actos que van en contra de la razón y los derechos ciudadanos, y esperamos que el sacerdote, en vista de los mandatos de la iglesia de perdonar y fomentar la paz, explique a sus seguidores que son las autoridades competentes los que deben investigar a fondo quiénes son los responsables de este delito y los exhorte a no lanzar falsas acusaciones ante los medios que nos ponen en riesgo y fomentan el prejuicio y odio hacia los no creyentes.
Para ampliación de información están disponibles los siguientes contactos:
Bogotá Atea – Jorge González – 314 263 0285
Asociación de Ateos de Bogotá – David Mariño Segura 321 384 6578
Saben xq armero se acabó con la avalancha, xq a un sacerdote lo arrastraron amarrado a un caballo y lo mataron, el maldijo armero, x eso les digo a todas aquellas personas q atacan calumnian a los sacerdotes católicos q se atengan a las consecuencias ya q es gravisim, pobre d esas personas
Saben xq armero se acabó con la avalancha, xq a un sacerdote lo arrastraron amarrado a un caballo y lo mataron, el maldijo armero, x eso les digo a todas aquellas personas q atacan calumnian a los sacerdotes católicos q se atengan a las consecuencias ya q es gravisim, pobre d esas personas
Un no creyente es un creyente.Imposible no ser creyente como opuesto a algo; en este caso a una creencia religiosa, Debe aplicarse la proporcionalidad simultánea de los opuestos complementarios. Un opuesto absoluto a algo no existe porque en alguna proporción es eso también. Es decir un ATEO es un creyente proporcional. Algo así como a un rebelde sin causa. Pero lo anterior es válido como INSTITUCIÓN para equipararse los que son los mismo, relativamente.Lo contrario es ninguna clase de identificación a punto de total indiferencia puesto que es algo que ni existe ni me interesa.
Un no creyente es un creyente.Imposible no ser creyente como opuesto a algo; en este caso a una creencia religiosa, Debe aplicarse la proporcionalidad simultánea de los opuestos complementarios. Un opuesto absoluto a algo no existe porque en alguna proporción es eso también. Es decir un ATEO es un creyente proporcional. Algo así como a un rebelde sin causa. Pero lo anterior es válido como INSTITUCIÓN para equipararse los que son los mismo, relativamente.Lo contrario es ninguna clase de identificación a punto de total indiferencia puesto que es algo que ni existe ni me interesa.